jueves, 14 de febrero de 2008

DECIDIDO, ME TIRO A LA PISCINA

Para empezar quiero disculparme con todos vosotros por haber tenido mi blog tanto tiempo sin actualizar. Mis ocupaciones varias, trabajo actual, estudio, y búsqueda de trabajo nuevo, entre otras actividades, han ocupado casi todo mi tiempo. Y la verdad me quedaba poco tiempo para relajar mi mente y mis dedos y escribir aquí como a mi me gusta.
Últimamente, cada vez que empiezo o acabo una etapa de mi vida, siempre he reflexionado sobre ello, y la he contado aquí. Y esta vez no iba a ser menos, y dejaros con la intriga.

Desde Noviembre, hasta el día de hoy, he estado trabajando en una Consultora de Formación, con la categoría de Instructora Experta en Prevención de Riesgos Laborales, en el que según el IV Convenio de Enseñanza no Reglada mi cometido es : “Instructor/a o Experto/a: Es quien imparte enseñanza en función de sus conocimientos específicos”, aunque en la realidad mis funciones eran muy diferentes a las que me indica el Convenio que deberían ser. Como dijo un ex compañero de esa empresa, parecíamos más teleoperadoras que cualquier otra cosa parecida a la figura de formador/a. Pero está claro, que la política de esa empresa parece que es obtener la mayor cantidad de ingresos, con una producción a ritmo frenético, sin parecer importarle la calidad de la enseñanza que imparte, y con el menos coste posible para la empresa, (o por lo menos esa es la imagen que dan).Pero en fin, si esa es su política en la que creen, no voy a ser yo la que la cambie, aunque alguna “puyita”, siempre he metido, jejeje. Ya me conocéis, que precisamente estar callada y ver pasar las injusticias como si viera llover normalmente, no es lo mío.
En fin, ellos me daban unos ingresos, que bueno, últimamente salvaba gastos, que era mi objetivo inicial, aunque tampoco para vivir desahogadamente… Y el horario, pues me permitía hacer mis otras actividades que llevaba paralelas.
Yo tengo un concepto algo distinto de la Formación. Para mi la formación es vocación, para mi la formación es creer en lo que estas impartiendo, y sobre todo tener la garantía de que vas a obtener unos resultados, que llegan a través de la calidad de enseñanza que se imparte, o como indica mi amigo Eduardo Martín Toval en un artículo sobre formación en prl: “garantizar” la formación puede llegar a interpretarse no solo como aseguramiento del instrumento formativo, sino incluso de que el resultado es satisfactorio. Y eso es lo que ahora me pide el cuerpo hacer.
En fin, en mis múltiples llamadas de teléfono que hacía casi todos los días, acompañadas de mi cigarrito, y mis continuos envíos de CV que todavía seguía enviando a cada oferta que me interesaba, (seguía manteniendo la esperanza de que algo que se adaptara a mi perfil laboral, y a mi carácter, tendría que existir por algún sitio), el pasado lunes por la noche, llegó a mi cuenta de correo, un email que me hizo ver una lucecita al final del tunel…
Hace tiempo que no recordaba lo que era tomar una decisión de cambio radical en mi vida. Cuando te acostumbras a una vida cómoda, y a unos ingresos mínimos, que bueno, si salvas gastos está bien, y a un horario cómodo, sin tener que pensar mucho y sin hacer mucho esfuerzo, y te llega una oportunidad como la de aquel email del lunes, te quedas a primera impresión como dubitativa, nerviosa, y porque no decirlo, CAGADA DE MIEDO. Te cuesta decidir el cambiar lo que tienes ya, aunque sea poco, pero cómodo, por algo nuevo y desconocido, que aunque sabes que el comienzo sera bueno, el final te desconcierta porque nunca sabes como terminará. Y como no, “Mi perfecta cabrona”, me habló al oído y me puso las cartas sobre la mesa, y me planteó, esto es lo que hay, MUEVETE, o NO, pero DECIDE. Y como no, también tengo que agradecer a mis amigos Pedro y Carlos, su ayuda y ultimo empujón a tomar la decisión del SI, ME TIRO A LA PISCINA, y ellos le pondrán agua, para que mientras pueda nadar….y seguir viviendo el día a día intensamente, tal como he estado viviendo últimamente. Sin miedo, de frente, decidida, y sabiendo lo que quiero.
De la etapa que termino, como todas las etapas, quiero dar las gracias a todos los compañeros que han pasado por mi vida estos 3 meses en los que he trabajado con ellos, ya que de todas las personas, siempre se aprende algo, (espero no se me olvide ninguno) Maria del Mar, Carmen García, Jose Carlos, Erik, Antonio, Garbiñe (que no Bergoñe), Carmen y Elena de Recepción, Patricia, Beatriz, Loli, Laura, Roberto, Juan Diego, Jesús C., Esther, Isa, Nieves, Amalia, Almudena, Ana Belén, Jesús Guerrero, Marisa y Eusebio. A todos y a todas, gracias por haberme soportado J, y como nunca me gusta decir adiós, …See you later, y ya sabéis donde encontrarme.